miércoles, 20 de enero de 2010

Melón con Jamón Vs Sandía con Mortadela

Todos y cada uno de nosotros de poder nacer de forma natural, lo hacemos de la misma manera, hasta ahí, claros estamos. Después, unos lo hacen con el típico pan debajo del sobaco y otros no ven el pan en su vida., hasta ahí también de acuerdo.

Pues bien, normalmente, todo aquel que nació pudiendo llegar a comer melón con jamón no saben de la existencia de la sandia con mortadela, siendo que este segundo es perfectamente conocedor de lo primero. El segundo, come todos los días su sandia con mortadela sabiendo que le encantaría el melón con jamón y a la espera de que algún día le llegue la suerte.

El primero, come todos los días su melón con jamón y está tan acostumbrado que, no ve mas allá y quiere creer que el mundo se alimenta de melón con jamón, para de esta manera no tener remordimientos de conciencia y , ser normal . A la vez, como percibe que el que come sandia con mortadela es feliz a veces, no entiende como puede suceder esto sin comer melón con jamón , él , que come melón con jamón también desea comer sandia con mortadela llegando a querer arrebatar el pedazo que se come el segundo, y considerar que este no es merecedor de ello y no debería por que comer sandía con mortadela pues ello proporciona algo distinto al melón con jamón… yo lo quiero, porque puedo !!!!!

Es como cuando el padre prior fue de visita al convento de los monjes de clausura,ellos, humildes hasta la médula. A la hora de prepararle exclusivamente a él la cena, emplearon gran parte del suministro que tenían en su alacena. El prior aún sabiendo esta carencia de víveres no le importó tranquilamente engullir aquellos apetitosos alimentos, que los frailes le habían elaborado; perdiz escabechada, capón , magníficos postres y un buen vino.

El prior, preguntó al fraile cocinero; qué magnífica cena habréis preparado para los monjes, decidme; el fraile cabizbajo le contestó, pues señor, unas sopitas de ajo, y el prior contesto, anda, con su ajito y todo!!.

MORALEJA: El que tiene no se considera afortunado, lo ve normal y cree que así es el resto del mundo. En un momento dado cree que merece más y se otorga hasta el derecho de ser dueño del grano que tenga en el culo, el mas desafortunado. El padre prior aún habiendo engullido los mejores alimentos, en realidad le fastidiaba la idea, de que los monjes felizmente se tomasen la sopita, cosa que él no comprendía pudiese satisfacerles y por lo cual, envidiaba el “ajito” de la sopita que ellos comerían y de esta manera prácticamente dejando de hacer aprecio a los manjares a él ofrecidos.

Joder!!!! Como somos, no?